Wilfred Agbonavbare, un icono de Vallecas
Wilfred Agbonavbare jugó seis temporadas en el equipo franjirrojo a principios de los 90
Wilfred Agbonavbare forma parte de la esencia de Vallecas. No solo porque el estadio del sur de la capital le haya dedicado la grada de fondo, ni porque en los bares de Vallecas los porteros de los futbolines fuesen negros. Wilfred Agbonavbare se ganó la simpatía de la afición vallecana por su actitud dentro y fuera de los terrenos de juego.
Seis temporadas jugó el portero en el Rayo Vallecano, 177 partidos defendiendo la portería del conjunto franjirrojo al que llegó con 24 años. Pero su camino no fue fácil. Tras jugar en varios equipos en su Nigeria natal Wilfred decidió dar el salto a Europa. Probó suerte en Inglaterra, pero no consiguió su objetivo. Meses más tarde Wilfred encontró la que sería su casa durante 6 campañas.
En Vallecas encajó a la perfección, con trabajo se convirtió en el portero titular del equipo y el Rayo consiguió un portero con reflejos, ágil y con acciones poco ortodoxas a la par que efectivas. Un jugador que poco a poco se ganó la simpatía de todos los rayistas y que consiguió marcar una época en el Estadio de Vallecas.
Wilfred Agbonavbare, uno de los pocos porteros africanos
Pocos porteros africanos han jugado en La Liga. Wilfred continuó con la apuesta que inició el Espanyol con N´Kono a principios de los 80. La llegada de Agbonavbare al Rayo animó a equipos como el Deportivo de la Coruña a contar en sus filas con Jaques Songo´o, portero del equipo que levantó la única Liga que tiene el equipo gallego, o Rufai, compañero de Wilfred en la selección nigeriana.
Kameni ha sido el portero africano con más nombre en los últimos años en La Liga, donde ahora contamos con Bono del Girona. Además, esta temporada ha sobresalido un portero africano a nivel continental. El meta del Ajax Onana, camerunés, y del ex Barça B.
Wilfred Agbonavbare en la selección
Wilfred no solo ha pasado a la historia en el Rayo Vallecano. Con la selección absoluta de Nigeria consiguió levantar una Copa de África en 1994 en Túnez. Un doblete de Amunike dio la victoria al combinado de la ‘águilas verdes’, donde jugaban Jay Jay Okocha o el ex del Sporting de Gijón, Yekini entre otros.
Además, la gran actuación de Wilfred con el Rayo le permitió disputar el Mundial de 1994 en EEUU. Nigeria cayó en octavos frente a la finalista, Italia. Pese a la eliminatoria, Nigeria hizo un gran Mundial quedando campeón de su grupo. Un grupo donde estaban la Argentina herida de Maradona y la mejor selección búlgara de la historia con Stoichkov como estrella.
La retirada de Wilfred
Tras perder protagonismo en el equipo con la llegada de Abel Resino al Rayo Vallecano, Wilfred decidió emprender un nuevo camino. Écija fue su nuevo destino aunque una temporada después el equipo andaluz decidió no renovarlo y Wilfred se quedó sin equipo.
Desde entonces, una lucha constante por ayudar a su familia y por salir adelante en la vida le dejó en una situación personal complicada. Wilfred falleció en 2015 por un cancer. Un luchador con el que la grada del Estadio de Vallecas se identifica.
Wilfred Agbonavbare forma parte de la historia y de la cultura de un club obrero donde se premia el compromiso y el trabajo. Dos facetas que Wilfred demostró a lo largo de su periplo por Vallecas.