Gaizka Mendieta, el murciélago de Valencia
Nacido en Bilbao y criado en Castellón, Gaizka Mendieta fue uno de los jugadores más importantes del fútbol español en los años 90. Desde la cantera, se hizo capitán del Valencia CF y marcó una época en el conjunto che.
Su trayectoria de arriba hacia abajo en el Valencia le hizo ganar confianza y adquirir mayor responsabilidad en el equipo. Dos finales de Champions a las órdenes de Cúper y una Copa del Rey – partido en el que marcó el mejor gol de su carrera- le encumbraron hasta ser el mejor centrocampista de Europa a comienzos de siglo.
Italia no fue la mejor opción
Tras alcanzar su máximo nivel en el equipo que le vio crecer, Gaizka Mendieta pensó que era momento de hacer las maletas. Una suculenta oferta al club y al futbolista hicieron que Mendieta probase suerte en la Lazio.
El nuevo reto no salió bien. Cambios de entrenadores, falta de confianza en él acabaron con su reto en Italia. Apenas 1000 minutos y 20 partidos después, su sueño de triunfar en Italia se había frustrado. Con crédito en España, Mendieta decidió volver a la Liga, pero esta vez se fue a Barcelona.
Un pequeño paréntesis en la ciudad condal
Tres entrenadores en una temporada, no ayudaron a encontrar la estabilidad que Mendieta necesitaba para alcanzar su mejor nivel. Otra temporada anodina, sin luchar por nada, provocó su salida. Buscó una nueva Liga, nuevas experiencias y terminó en la Premier League. Un proyecto pequeño, con ganas de crecer, que le llevó a Middlesbrough.
En el Boro comenzó siendo importante. Conquistó una Copa de la Liga, logro que les dio acceso a la Europa League. El equipo inglés llegó a la final, pero Mendieta se lesionó el día antes del partido decisivo contra el Sevilla. Prácticamente una temporada entera de baja, una circunstancia que le puso las cosas muy complicadas cuando se recuperó.
Sin contar para el entrenador y sin llegar a un acuerdo con el club, Mendieta pasó un año apartado del equipo. Su motivación se acabó y fue entonces cuando terminó la historia de Mendieta con los terrenos de juego.